Pese a ser un barrio conformado en su mayoría por pensionados de la Policía Nacional, Tacarigua sufre igual que el resto de la ciudad por el flagelo de la delincuencia. Allí, sus cerca de 2 mil habitantes viven con miedo a un atraco, pues los bandidos suelen hurtar en calles, tiendas o terrazas y escabullirse con facilidad por las diversas salidas que tiene la zona.
Nadie se siente seguro en Tacarigua. En junio del año 2017 un residente fue asesinado por un delincuente que le propinó cuatro impactos de bala al resistirse a un robo. La víctima era un profesor del Sena y su crimen fue motivo de repudio en toda la ciudad y de protestas de los vecinos, quienes les exigían a las autoridades garantizarles la seguridad. Desde ese momento se inició una lucha de la comunidad por obtener un CAI de Policía de forma permanente, sin embargo, tras cuatro años, aún no lo consiguen. Mientras tanto la delincuencia los tiene azotados y diariamente se producen entre tres y cuatro atracos.
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Augusto Zapata Torrenegra, presidente de la Junta de Acción Comunal de Tacarigua, explicó que hay varios puntos críticos en el barrio, uno de ellos es cerca a la Clínica Buenos Aires del lado de la Transversa 54 y otro el sector de la bonga a la altura de la avenida del Consulado. En ambos, las víctimas son sorprendidas por hombres en moto que les arrebatan sus celulares o pertenencias de valor y huyen rápidamente.
“Cuando la gente llega a esas consultas en la clínica y se sientan en los muros a esperar, les caen los motorizados y los roban, han pasado varios casos, eso es en la diagonal 62 iniciando la vía principal del barrio. Y en el sector de la bonga también nos tienen azotados, es allí precisamente donde se tiene pensada la construcción del CAI que tanto anhelamos. Ese CAI lo hará la Alcaldía de Cartagena a través de Distriseguridad, el proceso está avanzado y solo esperamos que sea una realidad”, manifestó Zapata.
Pese a la promesa de un CAI en el barrio, los moradores insisten en que se deben tomar otras medidas urgentes para frenar la inseguridad, sobre todo porque el cuadrante que cubre al barrio debe cobijar un amplio radio de acción en la zona y no da abasto para proteger a todas las comunidades aledañas.
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Los vecinos aseguran sentirse tan desesperados que tienen pensado tomarse las vías de hecho para exigir solución a las autoridades distritales y policiales. Afirmaron que hace poco un vigilante nocturno resultó herido por los ladrones al cumplir con sus funciones y ya completa más de una semana en una clínica recuperándose de las lesiones que sufrió en la cabeza.
“Se está organizando un plantón, vamos a tener que bloquear las avenidas que nos bordean y paralizar el tráfico vehicular porque ya no aguantamos más. Hace mucho tiempo está lista la documentación del CAI, los planos, las escrituras y ya goza de aprobación, solo falta que se ejecute la obra, pero no nos dan certezas ni fechas de cuándo se construirá”, finalizó el líder comunal.
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