Uno de los temas que más atemoriza a los jóvenes cuando están a punto de terminar la secundaria es elegir una carrera profesional, en este momento aparecen las dudas que dificultan hacer una pronta elección. Van desde ¿qué es lo que en verdad me gusta? hasta ¿esta carrera me producirá los ingresos suficientes?.
Lo primero que necesitas es el apoyo de tu familia, no siempre están las becas como una opción, así que es primordial saber si tus acudientes tienen la capacidad de pagar la carrera que deseas o si están de acuerdo con que elijas esa y no otra. Una vez sepas esto podrás comparar precios entre las distintas opciones que tienes.
Sin embargo, si no tienes ninguna opción no te preocupes, constantemente se realizan ferias universitarias a las que podrás asistir y conocer a cerca de diferentes carreras profesionales, en estos espacios te enterarás de profesiones que ni siquiera sabías que existían y que podrían ser lo que tanto deseabas. También puedes contar con la opción de visitar a un consejero que te asesorará sobre la carrera más indicada para ti.
Cuando tengas una lista de carreras por estudiar y sepas con cuales te identificas más o cuales puedes pagar, delimita aún más las opciones analizando el plan de estudio de las carreras en diferentes universidades, de esta forma sabrás realmente en cual universidad sientes que potenciarás tu conocimiento.
Por otro lado, es entendible que tú o tu familia tengan dudas si optas por una carrera poco tradicional, pero siempre recuerda que debe haber un equilibrio entre lo que amas hacer y lo que te conviene hacer, no tomes decisiones guiadas por la emoción o las pasiones, y tampoco elijas una carrera solo por los ingresos que podrías recibir una vez la termines y te encuentres trabajando.
Medita, infórmate y opta siempre por un equilibrio, esa es la clave para elegir no solo una carrera que te guste sino también que te convenga.
Comentarios ()