Se conoce como cistitis a la infección de la vejiga o las vías urinarias inferiores. Según explican expertos de Medline Plus, el servicio de información en línea de la Biblioteca Nacional de Salud de los EE. UU., “es causada por microbios, por lo regular bacterias. Estos microorganismos ingresan a la uretra y luego a la vejiga y pueden causar una infección” que comúnmente se desarrolla en la vejiga y también puede llegar a los riñones. Lee aquí: 4 aspectos a tener en cuenta de la cistitis
La mayoría de las veces, el cuerpo logra deshacerse de estas bacterias cuando orinas, pero en otras ocasiones, las bacterias pueden adherirse a la pared de la uretra o la vejiga o multiplicarse rápidamente hasta llegar a la vejiga y causar síntomas como:
-Orina turbia o con sangre.
-Orina con olor fuerte o fétido.
-Febrícula.
-Dolor o ardor al orinar.
-Presión o calambres en la parte baja del abdomen o en la espalda.
-Necesidad imperiosa de orinar con frecuencia, incluso inmediatamente después haber vaciado la vejiga.
¿Qué podemos hacer?
Es clave que, si crees que tienes cistitis, acudas al médico para que te diagnostique y trate, pero también puedes considerar ciertas prácticas que te te aliviarán mientras estés en la casa. Expertos de Mayo Clinic recomiendan:
Usar compresas calientes. Las compresas calientes en la parte inferior del abdomen pueden aliviar y minimizar las sensaciones de presión o dolor de la vejiga.
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Mantente hidratado. Bebe mucho líquido para mantenerte hidratado. Evita el café, el alcohol, los refrescos con cafeína y los jugos cítricos, así como los alimentos picantes, hasta que desaparezca la infección. Estos productos pueden irritar la vejiga y agravar la necesidad frecuente o urgente de orinar.
Toma un baño de asiento. Sumérgete en una bañera con agua tibia (baño de asiento) durante 15 a 20 minutos para aliviar el dolor o el malestar. Lee además: No aguantes las ganas de orinar
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