El avanzado deterioro de la cárcel de mujeres de San Diego, motivó a que este miércoles 31 de julio la Alcaldía de Cartagena, luego de un Consejo Distrital de Gestión del Riesgo, decretara estado de calamidad pública.
Medida que tiene como función establecer mecanismos para que las diferentes instituciones puedan excusarse de utilizar la ley de compras y contrataciones del Estado para adquirir insumos, rentar maquinaria y contratar cualquier otro producto o servicio para cubrir la emergencia en el penal.
Según lo indicado por el secretario del Interior y Convivencia Ciudadana, José Carlos Puello, la declaratoria de calamidad pública permitirá tomar medidas para reubicar a las internas en un lugar más seguro que resguarde su integridad física y además servirá para que los jueces no envíen más mujeres sindicadas al centro penitenciario.
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“Es por el bienestar de las reclusas que se toma esta decisión. Nos permitirá agilizar las medidas pertinentes para trasladar a las reclusas. Ya se adelanta un plan de acción con el Inpec para dar cumplimiento a la medida”, precisó José Carlos Puello.
La declaratoria será durante dos meses.
Según indicó el funcionario, el Distrito ha venido trabajando para el traslado de la cárcel de San Diego desde hace varios meses, sin embargo, hasta el momento no ha sido posible.
A pesar de encontrar un predio en la zona de conurbación Turbaco - Cartagena, que cumple los requisitos del Inpec y Uspec, el traslado no se ha realizado debido a que se espera del visto bueno de la Alcaldía de Turbaco.
Según se conoció hace un par de semanas, en el lugar se realizó un estudio de suelo y dependiendo de los resultados, la alcaldía del municipio emitiría una respuesta.
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Es de recordar que en los últimos años el Distrito ha decretado varios estados de calamidad pública: la vía Playetas, en la isla de Barú; la protección costera, la lucha contra el Fenómeno del Niño, las obras para el Canal del Dique, la intervención en el Salto del Cabrón, en Cerro de La Popa y la atención para los afectados por el Clan Quiroz.
En la noche de este miércoles se conoció que una de las 28 internas de San Diego que fueron trasladas el pasado 21 de julio a un centro carcelario en el municipio de Ipiales, Nariño, falleció.
Según lo indicó el presidente de la Veeduría de la Rama Judicial -Vejuca, Érick Urueta Benavides, Luisa María Carrillo Medina murió, al parecer, a causa de una patología. Sin embargo, no se ha confirmado cuál sea y desde cuando la padecía.
Según la información entregada por Urueta, la reclusa tendría dos hijos en la cárcel de Ternera.
Hasta el momento se han trasladado un total de 39 internas que están condenadas a cárceles de Bogotá, Medellín, Ipiales, Santa Marta y Jamundí.
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