A comienzos de semana un supuesto atraco terminó de mala forma para unos presuntos delincuentes que habrían intentado quitarle sus pertenencias a un motorizado que portaba uniforme de vigilante. Al parecer, la víctima puso resistencia y los doblegó, impactando a uno de ellos con un arma de fuego y dejándolo en grave estado de salud, incluso ayer esta persona seguía en una Unidad de Cuidados Intensivos.
Sucedió en el barrio San Francisco, a la altura del sector conocido como El Wio, y según algunos vecinos fue solo uno de tantos hechos delictivos que se cometen en esta zona desde hace varias semanas. Aseguraron que en promedio se registran tres atracos por día, principalmente en la curva donde se inicia la Vía Perimetral, metros antes de las vistosas letras de colores que dicen ‘Cartagena’.
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Allí, antes de la llegada del COVID-19 había presencia permanente de un par de policías que garantizaban la seguridad de todos los conductores, pero en medio de la pandemia este puesto fijo fue eliminado y la zona ahora está sin protección.
Residentes del sector, que pidieron reserva de su identidad por seguridad, afirmaron que un grupo de muchachos tiene azotada esa curva con los hurtos, sobre todo a quienes van a bordo de motocicletas. Y en los últimos días se la han enfilado a los que portan uniformes de vigilantes, debido al atraco fallido de hace unos días.
“Ayer a las 6 de la mañana tumbaron a un pobre vigilante que iba en su moto, lo golpearon, le quitaron el celular, la plata, el suéter y casi lo dejan sin ropa. La moto se la dejaron destruida. Dijeron que iban a matar un vigilante para desquitarse lo que le hicieron a su compinche. Esto está muy peligroso, porque también se meten con la gente del común. Hace dos días tumbaron otra moto en la que iba una pareja y atracaron a dos motorizados más en ese instante, hicieron una ‘tripleta’”, expresó una vecina.
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Otro de los denunciantes pidió ayuda al Distrito para que corten el monte crecido a un costado de la vía, pues ahí se esconden los delincuentes antes de sorprender a sus víctimas. “La gente va tranquila cuando ellos aparecen de repente. Sacan machetes, cuchillos, palos y hasta pistolas. Se meten en ese matorral y nadie los ve y cuando salen van tumbando al que sea sin importarles el daño que le puedan causar”, sostuvo.
En la comunidad aseguraron que la Policía Nacional sí hace rondas constantes varias veces al día, sin embargo los delincuentes al estar escondidos detrás de la alta vegetación no logran ser vistos, por eso le piden a la Policía Metropolitana de Cartagena, Mecar, disponer nuevamente de un par de unidades fijas en ese punto.
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